La
experiencia en este evento me dejo muy mal sabor de boca iniciando desde el
trato de la gente que pululaba en los pasillos observando con desprecio a los
nuevos visitantes, continuando con las obras expuestas, claro sí se les puede
llamar obra, muchas de ellas carecían de ingenio y creatividad, la pasión por
el arte a cambiando y arte contemporánea debe hacerse ver por lo que es, no por
lo que debería de ser.
Estos
nuevos autores o "artistas" muchas de las ocasiones tienen la fortuna
de ser natos de cuna de oro y eso directamente obliga a que si estudian una
carrera tan apasionada y bella como la del arte debería dar una contribución de
su parte como ofrecer algo de calidad, resultado del esfuerzo artístico pero
realmente a veces no se corre con la suerte todo el tiempo y nos vienen
ofreciendo una colección de reglas deformadas por el calor.
Neón
presentado en todas sus ideas posibles, el principio pensé, oh que
surrealismo!! Pero después solo sonreí, cuando me encontré por Neón en todas
sus formas me dije que poca imaginación y perdida de material.
Algunas
obras me gustaron tal vez se debió a ese juego de colores en cuanto a la
estética del objeto a presentar, ya sea por el conjunto de todo ahí, o realmente siempre fue porque me gustaba la
armonía que me trasmitía el mirarle.
Frases
como esta, me sacaron una que otra sonrisa y el hecho de decir o preguntarse si
el que se supone esta resguardando la vida es mudo o irrespetuoso es despertar
para poder ya cimbrar la una idea racional como la de una de mis poetas
favoritos que dice, "No puedo encontrar un lugar en cosmos a un Dios
producto de la debilidad Humana, a un excremento de la imaginación".George
N .Douglas
Continué
la visita encontrando cosas que me gustaban que atrapaban mi atención y también
crecía mi ser crítico así como mi exigencia en cuanto a cada pieza expuesta.
Concluí con un soplapiplas en espiral que me hizo pensar en la intención o el
mensaje que nuestro artista trato de decir con esta pieza porque a mi
percepción en cuanto a mi ser totalmente infinito y entiendo este objeto como
el ciclo de una vida si tiene un borde pero realmente no existe el final.
Una
de las cosas que más me disgustaron y de las que más lamento hablar es que el
malinchismo de este país tercermundista que nos hace lo que hoy en día somos,
nos vuelve día a día merecedores del maltrato de nuestro propio gobierno.
No
es justo como todos aquellos extranjeros con sus elegantes ropas de gala y
complexión de modelo piensan que por lucir bien, pueden sobajar a cualquier
persona solo por usar ropa tradicional de su cultura o simplemente porque
muchos deciden vestir sin ser escandalosos en el atuendo la sencillez es algo
que pocas personas tienen y que pocas logran entender, pero el verdadero
problema es que no importa que tan ricos sean, la educación no se compra y para
ser franca ahí nos dejan ver su poca cultura, educación y respeto. Que tristeza
ser espectador de este tipo de discriminación.
Por:
S. Vianey Cruz Flores
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